El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, declaró que la ciudad de Jerusalén nunca más será dividida.
Netanyahu hizo las declaraciones durante el Día de Jerusalén, que conmemora la toma de la antigua ciudad durante la Guerra de los Seis Días, en 1967.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, instó al mandatario israelí a regresar a la mesa de negociaciones.
El último esfuerzo de mediación hecho por Estados Unidos para ayudar a israelíes y palestinos a llegar a un acuerdo se descompuso el mes pasado cuando Israel rehusó liberar a un grupo de prisioneros palestinos que llevan largo tiempo encarcelados.
Abbas dijo a activistas de la paz israelíes que Israel debe liberar a los prisioneros y frenar la construcción de asentamientos durante tres meses.
Luego de tomar a la antigua Jerusalén de Jordania, Israel anexó el este de la ciudad en una medida que nunca ha sido reconocida por la comunidad internacional.
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