Cada año vemos como la gente sigue adoptando esta
tradición, sin siquiera saber de donde se origina y de porque se celebra Halloween.
Halloween es conocido también como “Noche de brujas y Noche de Difuntos” y
tiene su origen en la festividad celta. Los antiguos celtas creían que la línea
que une a este mundo con el otro mundo, se estrechaba con la llegada del
Samhain, permitiendo a los espíritus tanto benévolos como malévolos pasaran.
Los ancestros familiares eran invitados y homenajeados mientras que los
espíritus dañinos eran alejados.
Los principales países donde celebra esta peculiar
fiesta son: Estados Unidos, Canadá, Irlanda y el Reino Unido. En estos
lugares las casas son decoradas con los
colores que la caracteriza, naranja, negro y morado, y son colocadas calabazas
talladas con rostros de terror y luces dentro.
La tradición apunta a salir la noche de Halloween casa
por casa a pedir dulces. Los niños, que son los que realizan tal actividad,
salen disfrazados en medio de las calles oscuras, y se acercan a hogares con la
frase dulce o truco, lo que quiere decir que si no les das dulces estos
realizaran alguna travesura. Con esta forma tan peculiar de festejar este día,
lo han hecho ver como una festividad divertida y nada más.
A pesar del carácter que ha tomado, gracias a la
publicidad que se le da y de como es comercializado, Pues representa muchas
ganancias gracias a las ventas de disfraces y la realización de fiestas y
eventos en los que cobran entradas. Muchos aprovechan este día para realizar
ritos satánicos y rituales en los que hacen llamados a demonios y santos.
Lo cierto es, que cualquiera que sea la razón, se sigue
festejando cada cosa que se nos dice, que esta de moda,
porque los países a los que llamamos desarrollados y son grandes potencias lo
celebran. Debemos ser originales, tener
nuestra propia identidad y no perder nuestra esencia.
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